martes, 8 de septiembre de 2009

13. Piénsalo dos veces si tienes una obsesión por atraer la atención del sexo opuesto.

Algunas mujeres son infelices a menos que cada hombre, en las reuniones gravite alrededor de ellas como el “centro de su atención”. He conocido hombres que no pueden pasar delante de un espejo sin sentarse por un momento y mirarse, magnetizados por la belleza que perciben.

No hay comentarios:

Publicar un comentario